Cesar Augusto |
Conocido como César Augusto y más habitualmente como Augusto, fue el primer emperador del Imperio romano.
Nació en Roma, el 23 de septiembre del año 63 a.C. y murió en Nola el 19 de Agosto del año 14 d.C. y gobernó entre 27 a.C y el 14 d.C, convirtiéndose así en el emperador romano con el reinado más prolongado de la Historia.
Perteneciente a la dinastía Julio-Claudia, su padre fué Cayo Octavio Turino y su madre Atia Balba Cesoina.Tuvo varias esposas: Clodia Pulcra ( ? - 40 a.C), Escribonia (40 a.C - 38 a.C), Livia Drusila (38 a.C - 14 d.C).
Su descendencia fué: Julia la Mayor, Cayo César (adoptado), Lucio Julio César (adoptado) y Tiberio (adoptado). Este último, a la postre se convertiría en su sucesor.
El
joven Octavio se convirtió en heredero de Julio César tras el asesinato de
éste en 44 a.C.
Un año después, en 43 a.C, conformó junto a Marco Antonio y Lépido
una dictadura militar conocida como el Segundo Triunvirato, iniciándose de esta
manera, una serie de guerras civiles, por culpa de las ambiciones que
existieron entre ellos.
Lépido quedó al mando de África, ayudando a Augusto en la persecución de Pompeyo, venciéndolo en la Batalla de Naulochus, siguió huyendo hacia Oriente hasta Mileto donde fue capturado y muerto, por lo que Lépido exige a Augusto la isla de Sicilia, donde sus tropas cansadas de la guerra abandonan a Lépido en favor de Augusto, este le proporciona el cargo de Pontifex Maximus, pero es expulsado del Triunvirato y obligado al exilio.
Lépido quedó al mando de África, ayudando a Augusto en la persecución de Pompeyo, venciéndolo en la Batalla de Naulochus, siguió huyendo hacia Oriente hasta Mileto donde fue capturado y muerto, por lo que Lépido exige a Augusto la isla de Sicilia, donde sus tropas cansadas de la guerra abandonan a Lépido en favor de Augusto, este le proporciona el cargo de Pontifex Maximus, pero es expulsado del Triunvirato y obligado al exilio.
Marco Antonio obtuvo el mando en Oriente, concretamente en Egipto, siendo vencido por los partos, después de esta campaña, Cleopatra como faraona, se une sentimentalmente a Antonio, y organiza su propio ejército, Augusto con anterioridad concuerda la boda de su hermana Octavia con el propio Marco Antonio, para de esta manera unir políticamente sus lazos entre los dos, pero Antonio careciendo de moralidad, y con espíritu aventurero, se enamora de Cleopatra, repudiando a su mujer Octavia enviándola a Roma.
Como triunviro, Octaviano gobernó Roma y la mayor parte de sus provincias como un autócrata, haciéndose con el poder consular tras las muertes de los cónsules Aulo Hircio y Pansa y haciéndose reelegir a sí mismo todos los años. Tiempo después, el triunvirato se iría rompiendo ante las ambiciones de sus creadores
César Augusto, se vio traicionado doblemente, por el repudio de su hermana por Antonio, y la nueva alianza que está concluyendo con su amada Cleopatra, al estar organizando un ejército en Brindisi, y por si fuera poco descubre que en el testamento de Antonio, lega a sus hijos varios territorios romanos, junto con el deseo de erigir un mausoleo en Alejandría para los dos amantes Cleopatra y Antonio, por lo que Augusto declara la guerra a Cleopatra, pero su intención es ir contra los dos.
Marco
Antonio arma
una flota, que pone al mando de Agripa y Cayo
Sasio, Cleopatra organiza su propia armada
naval, reuniéndose con la de Antonio en golfo de Actium
el 2 de septiembre del año 31 a.C., donde tiene lugar la célebre batalla. La
flota de Antonio huye ante la acometida imperial, Cleopatra
intenta ayudarle, pero todo es inútil, a causa de la eficacia de Marco
Agripa por parte Augusto, con lo
que ambos amantes se suicidan.
César
Augusto en
principio sigue una política a la manera de la República Romana,
con objeto de hacerse con el Senado a su favor, sin querer
aceptar, títulos ni prebendas de este, con lo que demostró ser de la talla de
un gran estadista, ya que se encontró con una Roma
depauperada, por las guerras civiles y un pueblo descontento, por los abusos de
los gobiernos anteriores dictatoriales.
En primer lugar Augusto, proclama
la restauración de la República Romana, anunciando además
(como estratagema) retirarse de la vida política, a lo que el Senado
viendo en Augusto una persona capaz, por lo que el Senado
no se lo permitió, dándole además el título de Príncipe, que naturalmente
acepta, además de ello también le otorga el nombramiento de Imperator, a
efectos militares, a pesar de que ya el Senado se abroga
el derecho de nombrar sus propios generales.
Por ley, Augusto contaba con toda una colección de poderes
perpetuos conferidos por el Senado, incluyendo aquellos relativos al tribuno de la plebe y el censor. Ocupó el consulado hasta 23 a.C.
César
Augusto tiene
a su favor, su riqueza personal, que en varias ocasiones pone su dinero a
disposición del Senado en casos de apuros
económicos, y sobre todo Augusto, dispone de un elenco
gubernamental magnífico, Druso es destinado al norte a
las difíciles fronteras con los germanos, del Rhin
y el Elba.
El control de Augusto sobre la mayoría de las legiones de Roma existentes supuso una amenaza armada que podía ser usada contra el Senado,
permitiéndole de esta forma coaccionar las decisiones del mismo. Con este poder
para eliminar la oposición senatorial mediante el uso de armas, el Senado pasó
a adoptar un perfil dócil hacia su estatus soberano.
Su reinado por medio del clientelismo, el poder militar y la
acumulación de los cargos propios de la extinta República, se convirtió en el
modelo a seguir para los posteriores gobernantes.
El mandato de Augusto inició una era de paz relativa
conocida como la Paz romana o Pax Augusta (en su honor).
Salvo por las constantes guerras fronterizas que le obligaban a contener al
empuje de los germanos por el norte del Imperio Romano. y
con la excepción de una guerra civil de sucesión imperial que duró
un año, la sociedad del Mediterráneo gozó de un
ambiente pacífico durante más de dos siglos.
De igual forma, Augusto expandió el Imperio romano,
asegurando en el proceso sus fronteras mediante la subordinación a Roma de las
regiones circundantes. Además, celebró un acuerdo de paz con el Imperio Parto (el más poderoso de sus vecinos) por la vía diplomática, reformó el sistema tributario romano, desarrolló redes de caminos que contaban con un sistema oficial de mensajería,
estableció un ejército permanente (así como un pequeño cuerpo de marina), y
creó la Guardia Petroriana junto a fuerzas policiales
de seguridad, tanto para mantener el orden como para combatir los incendios en
Roma. Resulta destacable añadir que gran parte de la ciudad se reconstruyó bajo
su reinado.
En su vida familiar y privada Augusto,
no tenía tanta suerte, padeciendo frecuentes desarreglos gástricos, gripes aun
en pleno verano, y problemas de tipo epidérmico, se unió en matrimonio por
tercera vez, con Livia mujer de rígida moral,
dominante, pero con grandes dotes no tan morales, en cuanto a resolver
problemas de familia.
El Emperador Augusto, tuvo que soportar
tragedias, como la muerte de sus hijos Gayo y Lucio,
los defectos físicos de Claudio, añadiendo a estos
sinsabores la vida licenciosa de Clodia, y también
de Julia a la cual desterró a Ventotene, donde posteriormente
murió.
Uno de sus grandes últimos disgustos, fue la perdida de
todos los hombres de las legiones XVII, XVIII y XIX, seis cohortes auxiliares y
tres alas de caballería, en la batalla de los Bosques de Teutoburgo,
a manos del germano Arminio, en cuyo mando de las
legiones remanas se encontraba el general Varo, que ante tamaño desastre se
suicidio. Legiones estas que no se volvieron a reponer, siendo posteriormente
vencido Arminio, el cual tras la batalla, fue ajusticiado.
El año 14 a.C., Augusto muere
plácidamente a los 66 años, despidiéndose de su familia y de todos los
presentes, dejando el Imperio Romano en manos de Tiberio,
su hijastro , a plena satisfacción de su madre Livia,
que vería por fin cumplido su sueño de ver a su hijo como Emperador
de Roma.
Tras
su muerte, el Senado lo divinizó, siendo posteriormente adorado por el pueblo romano. A manera de legado, sus nombres «César» y «Augusto» serían adoptados por todos
los emperadores posteriores, y el mes de Sextilis sería renombrado "Agosto" en su
honor. Asimismo, sus logros son relatados en un documento conocido como "Los escritos de Divino Augusto" que, a
petición del propio Augusto, fue grabado en un par de pilares de bronce y
colocado enfrente de su mausoleo, llegando tiempo después a tallarse en
gran cantidad de edificaciones, muchas de las cuales han sobrevivido. No
obstante, este material es considerado poco objetivo históricamente, y más bien
es tratado como un escrito publicitario cuyo objetivo es ofrecer una visión
idílica del principado ejercido por Augusto.